Buscar este blog

martes, 25 de octubre de 2011

No todos los caminos llevan a Roma

Un hola y un "disque" beso, una mirada y una sonrisa
con tu parpadear suspirante, y entre tus delicados dedos que,
han cargado en mí, aquel pesar,
dolor, desvelo, frustración, alegría y apatía que, yo le llamo AMOR

Hoy, me parece impresionante; sentada frente a mi, me ves, tomas aire y das vuelta a tu mirada. ¿Qué acaso voy indigno de tu cercanía, soy insignificante ante tu amistad, o (lo que a mi me destroza) no soy nada comparado a tu amor, aquel amor que entregaste todo a cambio de dolor.
Nota todo el cariño que estoy dándote en cada segundo que, física, mental, sentimentalmente estás en mí, mi corazón, mi alma, mi respirar, mi sentir, MI AMOR.

Cruel pasión, triste desamor. No te ruego una clásica etiqueta de NOVIOS, sino tu querer, que no te desvanezcas ante mi ilusión.
¿Soy acaso el único que a través de esos lentes, frágiles y rosas, de tus ojos chicos y delicados (sensibles al llanto, cerrados ante la sonrisa y soñadores al amor) que no te veo a ti, veo tu dolor, tu miedo, tu felicidad, tus risas, tus recuerdos, tus sueños, tu AMOR.

Se dice que, todos los caminos llevan a Roma, yo creo en realidad que no, tu sin quererlo, me abriste un nuevo paso, un nuevo camino que, no lleve a Roma, no lleve a Europa, ni a la mágica ciudad donde la torre Eiffel es paisaje de nuestro AMOR

Dicho camino me ha llevado por un largo sentir de frustración, de dolor ¡Tengo frío al no sentirte cerca! , gritaba entre las tinieblas de ese camino; la verdad es que a cada instante, en cada parpadear y respirar me siento en aquel camino, sin luz, sin aire, sin presencia viva más que tú. En aquel camino donde Jupiter y Venus es nuestra escenografía, donde el infinito est´´a a nuestros ojos, donde para sentirme vivo, tengo que oir una vez más al Sol, que es sinónimo de tu voz.

Aquel camino me muestra la niña perfecta, que con tu pensar, tu mano entre tus labios, tu suave escribir, es un fugaz recuerdo, el dolor y me hace sentir a mi lado, aquella princesa de tez morena y voz ilustrada, esa joven humilde, reina de mi corazón.

Cruzas la pierna, te recargas en tu mano izquierda, tu moño se inclina, tu cabello decae, una sonrisa de vez en cuando. No te estoy viendo, pero sé que tengo una cita que si te extraño, apareces en aquel conmigo, conmigo.

Sé que todos los caminos NO llevan a Roma, TÚ ME LLEVAS AL MÁS ALLÁ.

No hay comentarios: